En Singapur, la perla del Asia, un factor clave ha sido su política de tolerancia cero contra la corrupción. Por eso Singapur es uno de los países con menores tasas de corrupción en el mundo. El Estado castiga con severas penas de cárcel, la prevaricación, el cohecho, la administración desleal y demás delitos vinculados con prácticas corruptas; llegando inclusive hasta la pena de muerte.
En Singapur la honradez es sagrada. En el sistema educativo existe y se dicta el curso de ética pública. Robarle al pueblo es traicionar a la patria. Se pide a los niños que lean y estudien ciencia y tecnología. Ahora los estudiantes leen hasta 25 libros por año.
La historia de Singapur registra que una de sus primeras tareas fue acabar con la corrupción; antes de educar Lee Kuan Yew se propuso fumigar a la corrupción, si es necesario a la propia familia. A los condenados se les envía a la cárcel, pero no se resocializan, entonces, deben ir al cementerio decía ell líder Lee Kuan Yew. Ministros, militares, jueces y civiles, asimismo, corruptos y corruptores a la pena de muerte, era el mensaje del líder político.
En la actualidad es Presidenta de Singapur Halimah Yacob desde setiembre 2017, cuyos actos es notablemente ceremonial. Primer Ministro lo ejerce Lee Hsien Loong, (hijo de Lee Kuan Yew) quien ejerce todos los poderes del Poder Ejecutivo. El Parlamento es unicameral con 104 escaños y controla las acciones del gobierno. Las próximas elecciones será el 2023.
No hay comentarios:
Publicar un comentario