El 21 de setiembre de 1974, un grupo de hijos del distrito de Huarochirí residentes en Lima, fundan una asociación sin fines de lucro bajo la denominación de ASOCIACION HUAROCHIRÍ, AH, siendo su primer presidente el señor Zacarías Tello Robles. Su primigenio Estatuto establece; ser una institución de índole cultural, artística, científica, literaria, deportiva y social; mientras que su patrimonio es inalienable e intangible para dar servicios asistenciales en el campo de la cultura en general. Efectivamente, el patrimonio institucional actual lo constituye un inmueble de 20,085.67m2. ubicado en el distrito de Ate, destinado para actividades sociales y deportivas, principalmente. Al cumplir otro aniversario, transcribimos 3 mensajes que aparecen en el Boletín Informativo No. 1, 2 y 3 de la AH, años 1997, 1998 y 1999. Veamos:
“Luchar, para conseguir un hermoso terreno donde los hombres de mañana, tengan un lugar en este suelo limeño donde guarecerse, dialogar y resolver los problemas de la institución y los de la Tierra Natal”. Zacarías Tello Robles.
“Abandonemos nuestra mentalidad su-desarrollada, ¡Unámonos!, así haremos realmente obras positivas por nuestra querida tierra que nos viera nacer. AFRONTEMOS EL RETO CON VALENTIA”. Teodosio Chumbimune Torres.
“Ha llegado el momento de que la Asociación Huarochirí, por los sagrados intereses de nuestro pueblo y por la fe inquebrantable de sus integrantes, enrumbe su camino con pasos firmes y seguros hacia el logro de sus grandes objetivos”. Juan Contreras Tello.
En los mensajes hay coincidencia filosófica que vincula una institución al desarrollo de Huarochirí. El espacio de diálogo y resolver problemas, obviamente, implica un colectivo. La existencia de muchas asociaciones civiles activas en grandes ciudades urbanas ha sido el sustento de la Ley No. 29363, Ley de Clubes Departamentales, Provinciales y Distritales, cuando dice: “El proceso migratorio que data de varios lustros, ha conformado en Lima una nueva geografía social… Los Clubes, son el referente inevitable a través de los cuales se canalizan las gestiones de las comunidades rurales y urbano marginales y de los pueblos olvidados del Perú profundo…” La motivación de dicha ley tiene relevancia y trascendencia al reconocer y fortalecer las asociaciones para actuar, intermediar y contactar con entidades públicas del Estado en los procesos de desarrollo regional y local concertado con la sociedad civil, mejor si se trata de zonas rurales como Huarochirí.
Valga en este 37 aniversario, para que asociadas, asociados y miembros del Consejo Directivo orienten a la AH en más dinámica, considerando el rol de la sociedad civil organizada e incorporar el uso de nuevas tecnologías; NO hacerlo es regresivo y perverso en la sociedad del conocimiento, la información y nuevas tecnologías. Aquello, es una reflexión generada por preocupaciones y consultas de varios asociados al autor de estas líneas, quienes reclaman con legítimo interés se aperture el diálogo y se logre una verdadera integración. “El arte de dirigir consiste en saber cuándo hay que abandonar la batuta para no molestar a la orquesta”. H. Von Karajan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario